Punción seca
La punción seca es una innovadora técnica fisioterapéutica que utiliza agujas de acupuntura para tratar ciertas dolencias.
Se define como una técnica semi-invasiva porque las agujas penetran la piel en busca del punto gatillo, desactivarlo y acabar con el dolor. La aguja se puede considerar una extensión de los dedos del fisioterapeuta.
Los puntos gatillo pueden producirse por causas muy diversas, movimientos repetitivos, corrientes frías que afectan directamente al músculo, mantener el músculo en posición acortada durante bastante tiempo, golpes, etc.
Hay que acompañar la punción con otras técnicas o tratamientos, como, por ejemplo; aplicación de sprays de frío y estiramientos, contracción voluntaria del músculo y liberación o liberación por presión.
Como cualquier otra técnica de tratamiento, el éxito de la punción seca viene determinado por diversos factores. Mantener unos malos hábitos posturales o no realizar posteriormente los ejercicios recomendados por el experto, son sólo algunas de las causas para que esta técnica no funcione. A pesar de ello, las probabilidades de éxito son muy elevadas, especialmente si el material utilizado es el adecuado y si se deja esta técnica sólo en manos de profesionales.